En medio de la emergencia sanitaria por coronavirus, la ciudad inca de Machu Picchu volverá a recibir turistas el 1 de julio, por lo que las autoridades implementaron un protocolo de seguridad en salud. El lavado de manos, uso de mascarillas, el distanciamiento social y el uso exclusivo de rutas son algunas de las medidas que se aplicarán.
Según el Ministerio de Comercio Exterior y turismo (Mincetur), la también llamada “Llaqta inca” recibirá a poco más de la décima parte de al menos 5 mil turistas que solían ingresar en sus mejores épocas.Este será un duro golpe para la economía, dado que el 95% de habitantes vive del turismo, dijo el alcalde del distrito Darwin Baca León.
“Bajo un documento al que le hemos llamado Acuerdo por Machu Picchu, tenemos que estar bien comprometidos con la implementación y el cumplimiento de los protocolos que debemos realizar… el porcentaje de turistas que van a llegar a Machu Picchu serían alrededor de 500, en el mejor de los casos”, señaló.
Más de mil dueños de restaurantes, hoteles, artesanos y otros, esperan el retorno de los turistas. Sin embargo, la primera etapa de la reactivación económica solo beneficiará al 20 o 30 por ciento de 984 negocios locales. “Tengo un hotel en Machu Picchu que voy a tratar de reactivar con los protocolos”, explican los empresarios.
En tanto, el subgerente de Turismo y Desarrollo Económico de Machu Picchu, Walter Escobedo, informó que se realizará una exhaustiva supervisión del cumplimiento de protocolos de seguridad. El aislamiento social le dio un “respiro” a la maravilla mundial y a sus más de 30 hectáreas que albergan especies de la flora y fauna.