Millones de ciudadanos en el norte de China, especialmente en Beijing, Tianjin y Hebei, han sido instados a permanecer en interiores debido a las inusuales y peligrosas ráfagas de viento que han alcanzado los 150 kilómetros por hora. La recomendación incluyó, de manera particular, a personas con peso inferior a 50 kilos, debido al riesgo de ser arrastradas por la fuerza del viento.
RÁFAGAS TAN FUERTES QUE PUEDEN DERRIBAR A UNA PERSONA
El Servicio Meteorológico de Beijing emitió una alerta naranja, la primera de este tipo en la capital china, calificando el evento como un fenómeno de viento extremo, prolongado, de amplio alcance y con potencial destructivo. La intensidad de las ráfagas, provenientes del sureste asiático y de Mongolia, ha sido clasificada entre once y doce grados en la Escala Beaufort, lo que corresponde a un nivel de viento capaz de causar daños severos a estructuras y árboles.
La magnitud del fenómeno obligó a la suspensión de clases, cancelación de eventos públicos, interrupciones en los servicios de tren y el cese temporal de trabajos de construcción. Las autoridades también restringieron el acceso a bosques y zonas montañosas, en un intento por prevenir accidentes.
Videos que circulan en redes sociales muestran a personas siendo arrastradas por el viento mientras transeúntes intentan ayudarlas, reflejando la fuerza inusual de este fenómeno. Aunque los vientos fuertes no son extraños en la región, los expertos indican que no se había registrado algo de tal intensidad en años.