Esta mañana, desde el balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro, el papa Francisco ofreció su tradicional mensaje de Navidad, donde reflexionó sobre los conflictos armados y los males que afectan al mundo.
"Que callen las armas en la martirizada Ucrania. Que se tenga la audacia de abrir la puerta a las negociaciones y a los gestos de diálogo y de encuentro, para llegar lo antes posible a una paz justa y duradera", dijo el Pontífice.
"Que callen las armas en Oriente Medio. Con los ojos fijos en la cuna de Belén, dirijo mi pensamiento a las comunidades cristianas de Israel y Palestina, en particular a Gaza, donde la situación humanitaria es gravísima", agregó.
NACIMIENTO DEL SALVADOR
Finalmente, pidió "que el nacimiento del Salvador traiga esperanza a las familias de miles de niños que están muriendo por la epidemia de sarampión que se registra en varias ciudades de la República Democrática del Congo", informa EFE.