Todas estas chicas vieron en su virginidad un banco de donde sacar abundante dinero y de forma rápida. Deudas, lujos, estudios, entre otros factores, llevaron a que estas jovencitas ofrecieran su pureza a través de Internet, una forma de acceder al dinero poco común para los mortales. No todo el mundo subasta su virginidad al mejor postor. A pesar de que es una desición libre, muchos no dejan de sentir tristeza por el hecho de llegar hasta subastar la castidad, al margen de cuan poderosos hayan sido los motivos. Es por ello que algunas de ellas fueron criticadas duramente a través de la redes, mientras que otras hasta tuvieron problemas legales.