En una operación conjunta entre el municipio de Ventanilla y la Policía Nacional, se llevó a cabo un operativo para recuperar espacios públicos en el distrito que habían sido ocupados por personas indigentes. El objetivo del operativo era desmantelar las estructuras ilegales construidas por estos individuos.
Durante el operativo se produjo una batalla campal, cuando personal de serenazgo y las fuerzas policiales se enfrentaron a los indigentes quienes opusieron resistencia para retirarse del lugar. Algunos de ellos llegaron incluso a amenazar con cuchillo, desafiando las órdenes de las autoridades.
Finalmente, con el uso de maquinaria pesada, se logró desbaratar todas las covachas que habían sido instaladas ilegalmente en los espacios públicos.
USO DE LA FUERZA
Se presume que previamente el municipio había solicitado a estos indigentes que desalojaran el lugar, sin embargo, al no acatar las advertencias, fue necesario recurrir al uso de la fuerza para garantizar el cumplimiento de la ley.
Además del desalojo de los indigentes, la operación también incluyó el retiro de comerciantes ambulantes que se encontraban instalados en calles y avenidas no autorizadas.