Se trata de un nuevo plan del Estado que ofrece ayuda a las personas de bajos recursos que padecen de cáncer. Los beneficios a los que acceden los pacientes son chequeos y tratamientos gratuitos, así como sesiones de autoayuda para combatir la profunda depresión en la que caen tras enterarse del padecimiento. Una de las atenciones especiales es la que ofrecen a las mujeres que sufren de cáncer de mama, la afección con mayor índice de mortalidad en mujeres del país. Ellas asisten a diferentes talleres como baile y maquillaje para distraerse y conseguir la energía suficiente para continuar la lucha contra la maligna enfermedad.