Tras el anuncio del Gobierno de la ampliación del trabajo remoto hasta el 31 de julio del próximo año, más de 220 000 personas podría continuar sus actividades de manera segura; sin embargo, según el abogado laboralista Germán Lora, los empleadores son quienes decidirán si los trabajadores continúan bajo esta modalidad o no.
En esa línea, indica que si las empresas deciden continuar con el trabajo remoto, deberán mantener las mismas condiciones laborales de sus empleados, es decir, el mismo número de horas de trabajo y la totalidad del sueldo.
Además, agrega que en caso de que el trabajador no cuente con el mobiliario o tecnología para desarrollar su empleo, la empresa deberá proveerlo.