Casi 24 horas de desesperación vivió una madre que buscaba a su hijo de apenas 10 años, desaparecido luego de abordar un bus en Carabayllo. El menor había subido a la unidad a la altura del kilómetro 19.5 de la avenida Túpac Amaru y, según las primeras versiones, se quedó dormido durante el trayecto. La familia lo esperaba en el paradero La Cumbre, pero nunca llegó. Desde entonces, sus parientes iniciaron una intensa campaña en redes sociales para dar con su paradero.
Mientras la Policía Nacional iniciaba las labores de búsqueda, la madre denunció haber recibido llamadas de extorsionadores que se hicieron pasar por una supuesta mafia extranjera. Los delincuentes exigían entre 700 y 20 mil soles a cambio de liberar al menor, incluso enviando imágenes falsas obtenidas de Google Maps. “No me llamen a pedirme plata, solo quiero a mi hijo”, rogó la mujer ante las cámaras, entre lágrimas.
Horas después, una llamada cambiaría el rumbo de la historia. Una mujer avisó que había encontrado a un niño deambulando solo en La Victoria. La madre, acompañada de efectivos policiales, acudió al lugar y protagonizó un emotivo reencuentro con su hijo, quien se encontraba con hambre y frío, pero sin lesiones. Testigos señalaron que el pequeño había pasado la noche en un parque antes de ser reconocido.
INVESTIGACIONES EN CURSO
El coronel Franco Moreno Panta, jefe de la División de Investigación de Secuestros de la Policía Nacional, confirmó que se investigará el origen de las llamadas extorsivas. “Personas inescrupulosas quisieron aprovecharse del dolor de esta familia, pero gracias a la rápida acción policial y la asesoría brindada, se evitó un pago y se logró ubicar al menor”, declaró. Felizmente, la historia tuvo un final feliz: madre e hijo volvieron a abrazarse tras una noche de miedo y desesperación.