Debido a que los cimientos de más de 50 viviendas están dañados por la humedad, el alcalde de ese distrito, Luis Bueno, informó que dichas casas serán demolidas, luego del desastre que ocasionó el desborde del río Huaycoloro.
Además Bueno Quino, señaló que los pobladores de Cajamarquilla no quieren abandonar sus casas ni propiedades a pesar de que estos han sido declarados inhabitables e inservibles.
También, dijo que los pobladores serán reubicados en localidades vecinas y que hasta el momento más de 500 familias, apostadas en seis kilómetros a lo largo del río Huaycoloro, deberían abandonar la zona porque están en riesgo permanente.