Parece que nada detendrá la ejecución. David Joseph Pittman, hombre con una presunta discapacidad mental y condenado a la pena capital por triple homicidio, recibirá la inyección letal el próximo miércoles en la Florida, Estados Unidos.
Organizaciones civiles han pedido frenar la muerte del hombre, condenado por matar en mayo de 1990 a los padres e hija de su esposa Marie, de quien estaba divorciándose, en Mulberry, una comunidad al este de Tampa, en el centro de Florida.
DAÑO CEREBRAL
El sujeto mató a puñaladas a Clarence y Barbara Knowles, además de cortar el cuello de Bonnie, de 21 años. La madre del criminal dijo que su hijo no aprendió a hablar hasta los 4 años, mientras que un psicólogo aseveró que tenía signos de daño cerebral.
Asociaciones como Death Penalty Action y Floridians for Alternatives to the Death Penalty pidieron a las autoridades clemencia, al señalar que Florida ya ha matado a 11 criminales en lo que va de 2025, tras superar el récord de nueve el año pasado.