Al menos tres personas fallecieron y otras cuatro están clínicamente muertas al caer el autobús en el que viajaban al río Moika desde un puente en el centro de la ciudad de San Petersburgo, en Rusia. La unidad trasladaba a unas 20 personas.
Los buzos lograron sacar los cuerpos de varios pasajeros a través de las ventanas del autobús siniestrado y en algunos casos trataron de reanimar a los heridos en el mismo techo. Se conoció que varios de los lesionados están graves.
INVESTIGAN ACCIDENTE
Testigos revelaron que el conductor y varios pasajeros pudieron abandonar el bus por sus propias fuerzas. Por estos meses, la temperatura del agua en los canales de la ciudad báltica es más baja de lo habitual.
Tras perder el control, el chofer se llevó por delante a varios automóviles estacionados al borde de la calle, luego dio un brusco giro y se precipitó al río. Las autoridades investigan las causas del accidente.