La policía italiana y un equipo de la Guardia Forestal de la ciudad de Brescia, norte del país, han cerrado un circo que exhibía a dos perros de raza chow chow disfrazados de osos panda.
El propietario ha sido detenido y está acusado de maltrato animal y de estafa a los espectadores.
Los dos perros eran presentados al público como un cruce entre chow chow y oso panda, aunque en realidad eran animales con el pelaje teñido de blanco y negro.
Los canes, que permanecen en el circo a la espera de ser destinados a otro lugar más adecuado, son un macho y una hembra, tienen 6 meses de edad y fueron traídos de Hungría.
Los exámenes veterinarios señalan que se encuentran en "buen estado de salud", aunque presentan un "excesivo lagrimeo de los ojos, debido a los flashes que soportaban a diario".