El papa calificó de arrogancia que las parejas infértiles recurran a cualquier método para tratar de concebir y las exhortó de que la única forma de tener hijos es mediante la relación sexual, luego de una conferencia sobre la infertilidad en el Vaticano.
"La dignidad humana y cristiana de la procreación, de hecho, no consiste en un producto sino en su vínculo con el acto conyugal, una expresión del amor de los esposos de su unión no solo biológica, sino también espiritual", sostuvo.
Asimismo, remarcó que el matrimonio es el único escenario permitido para concebir y pidió a los expertos en ciencias “resistir la fascinación de la tecnología de la fertilidad artificial” ya que “es el ingreso fácil o la arrogancia de tomar el lugar del Creador”.