Balón de Oro 2018: Luka Modric rompió racha de 10 años de Messi y CR7
El croata, a sus 33 años, recibió este lunes el premio de France Football y pasa a la historia del fútbol mundial tras haber vencido a los monstruos del balompíé mundial.
El croata, a sus 33 años, recibió este lunes el premio de France Football y pasa a la historia del fútbol mundial tras haber vencido a los monstruos del balompíé mundial.
Luka Modric se coronó como el nuevo Balón de Oro de 2018. El croata, a sus 33 años, recibió este lunes el premio otorgado por France Football y se sitúa en la historia del fútbol mundial no solo por haber ganado además el premio The Best y el de mejor jugador de Rusia 2018, sino por haber roto con la diarquía que durante años impusieron Lionel Messi y Cristiano Ronaldo.
“Es un sentimiento único y un honor. Tengo muchísimas emociones difíciles de expresar. Déjame dar las gracias a los que me han ayudado, a los compañeros de equipo y entrenadores del Real Madrid, y a todos los que trabajan en el club”, dijo tras recibir el premio, visiblemente emocionado.
“También a entrenadores y compañeros de la selección de Croacia, a mi familia, mujer e hijos, que me llenan como persona y me ayudan en todos los aspectos”, continuó el veterano centrocampista del Real Madrid y capitán del ‘Ajedrez’.
“De niños todos tenemos sueños, mi sueño era jugar en un gran equipo y ganar trofeos. El balón de oro es más que un sueño. Así que es un honor y un privilegio recibir este trofeo hoy. Si he ganado es porque he hecho algo especial este año”, indicó Modric.
Fue en París donde recibió el galardón , dejando atrás a su ex compañero Cristiano Ronaldo y a su rival del Atlético, Antoine Griezmann. El croata estuvo acompañado por su familia y dio la sorpresa al vencer sin problemas, considerando que Francia fue la campeona del mundo este año.
El humilde croata, querido y apreciado, corona así una carrera y vida de luchas: desde huir del horror de la Guerra de los Balcanes siendo muy pequeño, hasta sus esfuerzos por fichar con el Madrid, y pasar de las dudas a ganarse el corazón del club y la afición.