El cuartel Hoyos Rubio viene experimentando una transformación histórica gracias al megaproyecto “Kuntur”, considerado el más emblemático del Ejército del Perú en los últimos años. Esta obra busca modernizar las instalaciones militares y mejorar la habitabilidad de su personal, tras más de ocho décadas sin una renovación en el Rímac.
Según explicó el general Robert Valles Angulo, jefe del proyecto, la primera etapa contempla una intervención en cinco hectáreas y la construcción de 22,000 metros cuadrados. Este tramo inicial incluye la edificación de cuatro batallones con capacidad para alojar a 250 personas, entre soldados del servicio militar, técnicos, suboficiales, oficiales y personal civil.
El proyecto, desarrollado con apoyo del Ministerio de Defensa, el Ministerio de Economía y supervisado por la Contraloría General de la República, apunta no solo a renovar las instalaciones, sino también a reforzar la operatividad del Ejército en escenarios de emergencia y defensa nacional.
Además de los nuevos batallones, se contempla la edificación de la primera brigada multipropósito, la comandancia de la Segunda División de Ejército y diversas áreas de instrucción, entrenamiento y bienestar. El proyecto ha sido dividido en varias etapas, cuya ejecución está programada hasta el año 2026.
Paralelamente, el Ejército también avanza con el megaproyecto “Motochatas”, cuyas instalaciones ya están en la fase final. Esta obra incluye la comandancia, alojamiento para oficiales y dependencias para el personal de tropa, con una segunda etapa ya en marcha desde abril y cuya culminación está prevista para mayo del próximo año.
El general Valles destacó que estas inversiones se están ejecutando bajo un enfoque de eficiencia, transparencia y control permanente. “La articulación entre el Ejército, el sector Defensa y los órganos de control garantiza un proceso transparente que fortalece nuestras capacidades institucionales”, precisó.
Con este tipo de proyectos, el Ejército del Perú se alista no solo para optimizar su desempeño logístico y operativo, sino también para ofrecer mejores condiciones a su personal, en línea con los estándares modernos que exigen los nuevos escenarios de seguridad y defensa.