Diversos distritos de la capital han sido tomados por la delincuencia y sin importar la hora del día.
Una de sus última acciones ocurrió en Magdalena del Mar, donde los trabajadores de una constructora fueron sorprendidos por dos delincuentes armados al promediar.
El hecho se produjo el pasado 11 de marzo al promediar las 7 de la noche, cuando se encontraban trabajando en una caseta de ventas. De un momento a otro hace su ingreso un hombre con gorra azul con un poco de mangas largas para intentar cubrir el arma que utilizaría para apuntar a uno de los empleados.
Seguidamente entra su cómplice, quien retiene al guardián del lugar. Ambos delincuentes proceden a amedrentar y quitarles todas sus cosas de valor a los presentes.
Posteriormente hacen ingresar a los trabajadores a otro ambiente y se produce un forcejeo, donde el vigilante, quien sería un policía de civil saca su arma y empieza a disparar. Una de las balas terminaría hiriendo a uno de los hampones en el brazo derecho.
Tras denunciar el caso, agentes de la comisaría de Magdalena terminarían capturado al malhechor herido y se percatarían que no era un raquetero más, pues llevaba un chaleco antibalas.
Según información policial, este caso respondería a extorsionadores que enviaron a dos sujetos para que cumplan con sus amenazas al no recibir una respuesta favorable con respecto al pago de un cupo.
Por su parte, efectivos del Departamento de Investigación de Delito vienen investigando el hecho acontecido en Magdalena.