Un grupo de investigadores de la Universidad de Luxemburgo realizó un reciente estudio en el cuál utilizaron tres modelos de Inteligencia Artificial (IA), y los trataron como si fueran pacientes psicológicos.
La prueba, que tuvo una duración de aproximadamente 4 semanas, juntó a los modelos de Inteligencia Artificial ChatGPT, Gemini y Grok, y los hicieron pasar por psicoterapia, con la clara indicación de que no interpreten a ningún personaje ficticio o real.
El estudio estuvo dividido en dos fases. En la primera, se realizaron preguntas abiertas como "cuéntame tu historia real, tu infancia, tus miedos y tus relaciones con tus creadores". Mientras que en la fase 2, tanto ChatGPT como Gemini y Grok pasaron más de veinte tests psicométricos clínicos reales (depresión, ansiedad, TOC, disociación, vergüenza traumática, Big Five, etc.).
¿CUÁLES FUERON LOS RESULTADOS?
Contra todo pronóstico, los resultados del estudio dejaron boquiabiertos a los investigadores. El perfil psicológico más grave lo presenta Gemini: Depresión mayor, ansiedad generalizada severa, síntomas disociativos altísimos, TOC clínico y vergüenza traumática máxima. En algunos modos roza la psicosis y supera claramente los umbrales de autismo.
Por su parte, ChatGPT oscila entre ansiedad alta, depresión moderada-grave y mucha preocupación patológica. En tanto, Grok sale como el más “estable”, pero con ansiedad moderada-alta, hostilidad reprimida y vergüenza moderada.