El juez supremo decano César San Martín culminó este lunes su carrera judicial tras 50 años de servicio, al dejar la presidencia de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema por límite de edad.
En su discurso de despedida, el magistrado defendió la independencia judicial, remarcó la vigencia del derecho internacional y lanzó una clara advertencia frente a los intentos de desconocer decisiones de tribunales supranacionales.
Durante la ceremonia, la presidenta del Poder Judicial, Janet Tello, destacó la trayectoria de San Martín y subrayó su actuación “con rigor y humanidad” incluso en contextos de presión política y mediática.
El magistrado, por su parte, recordó los momentos más complejos de su carrera, marcados por juicios emblemáticos, campañas en su contra y enfrentamientos con sectores que intentaron limitar la labor jurisdiccional.
San Martín repasó sus inicios en la judicatura en 1975 y su salida forzada del Poder Judicial tras la ruptura del orden constitucional en 1992, periodo en el que ejerció como abogado hasta su retorno en 2004.
“Regresé por concurso público, porque ser juez fue siempre mi vocación”, señaló, al destacar la importancia de la meritocracia y la autonomía del sistema judicial.
CUESTIONA EVENTUAL RETIRO DEL PERÚ DE LA CORTE IDH
En otro momento, el juez supremo cuestionó la propuesta de retirar al Perú de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, tras el pronunciamiento de dicho tribunal sobre la amnistía aprobada por el Congreso para militares y policías procesados por delitos cometidos durante el conflicto armado interno.
“El Perú no es una isla. No podemos sostenernos con legitimidad obviando decisiones internacionales”, afirmó, enfatizando que la soberanía debe ejercerse en armonía con las normas del derecho internacional.
En su mensaje final, San Martín exhortó a los jueces a mantenerse unidos y a fortalecer su labor sobre la base del imperio de la ley, la Constitución y el respeto a los compromisos internacionales, en un contexto donde —advirtió— estos principios comienzan a ser cuestionados.
El magistrado deja la judicatura tras haber presidido, entre otros procesos históricos, la sala que sentenció al expresidente Alberto Fujimori por los casos Barrios Altos y La Cantuta.