No importa cuánto haya estudiado o vivido, nadie está libre de ser estafado. Esa es una sentencia que sin duda calza a la perfección con el caso que a continuación vamos presentar. La historia de una estafa en la que las víctimas son incluso, en algunos casos, expertos en riesgos de inversión, pero que ante dos jóvenes considerados cercanos a ellos, se quedaron sin blindaje y cayeron redonditos. Entregaron fondos por encima de los 150,000 dólares y hoy no saben cómo recuperarlos. Los jóvenes, como ellos mismos habrían admitido, se habrían hecho de por lo menos siete millones de dólares sobre la base de una estafa piramidal.