Le ha dado la vuelta al mundo. Un reciente reportaje británico ha dado un giro a lo que se sabía de la pandemia que dejó millones de muertos y un gran retroceso económico mundial, pues este peligroso virus habría sido creado en los laboratorios de Wuhan en China como parte de un proyecto secreto para crear una nueva arma biológica.
Así lo aseguró el diario británico The Sunday Times, en el que aseguran que científicos y el ejército chino trabajaban “combinando los coronavirus más letales del mundo para crear un nuevo virus mutante”, sin embargo, se había filtrado de los laboratorios de virología después de un accidente.
A esto se llegó luego que investigadores examinaran comunicaciones interceptadas de alto secreto. El diario en mención ha revisado cientos de documentos, incluyendo informes confidenciales, memorandos internos, artículos científicos y correspondencia por correo electrónico que se obtuvieron por medio de fuentes o por activistas de la libertad de información en los tres años transcurridos desde la pandemia.
También hicieron entrevistas a investigadores del Departamento de Estado de Estados unidos, incluido expertos en China que realizaron la primera investigación sobre los orígenes del virus COVID-19. “Los investigadores que han intentado encontrar pruebas concluyentes se han visto obstaculizados por la falta de transparencia de China”, advirtieron, pero que tras esta nueva investigación la imagen de los que ocurrió es “más clara”.
ORIGEN
De acuerdo al reportaje, el Instituto de Virología de Wuhan, en China, inició a buscar el origen del virus SARS en 2003, con ayuda de fondos del gobierno de Estados Unidos por medio de una organización benéfica con sede en Nueva York, cuyo presidente era un zoólogo educado en Gran Bretaña.
En 2016 los investigadores descubrieron un nuevo tipo de coronavirus en un pozo de mina en Mojiang, provincia de Yunnan, donde las personas murieron por síntomas similares a los del SARS. Sin embargo, China en lugar de advertir al mundo, no informó de las muertes y los virus que se encontraron allí son reconocidos como los únicos miembros de la familia inmediata del Covd-19 que se sabe que existieron antes de la pandemia, luego de ello fueron transportados al Instituto de Wuhan.
Para los científicos norteamericanos, allí empezó el programa clasificado del virus, y la razón por la que se encubrió fue que la búsqueda estaba relacionada con el ejército para la búsqueda de armas biológicas virológicas y vacunas.
Además, The Sunday Times señaló que el estado chino impidió a expertos extranjeros identificar la fuente de la pandemia, además, Alicia Hughes, británica experta en murciélagos y profesora asociada en la Academia de Ciencias de China, que supervisa el instituto de Wuhan, había estado trabajando en las minas. Hughes indicó que se le prohibió hablar con la prensa sobre su investigación y que el servicio de seguridad de China la vigilaba.
EN LA SOMBRA
Según The Sunday Times, investigadores de inteligencia señalaron que los científicos de Wuhan estaban trabajando con nueve variantes diferentes de Covid, además, que habrían estado realizando experimentos de ‘pasajes en serie’ con ratones humanizados.
En tanto, también los investigadores creen que el ejército chino estaba interesado en desarrollar una vacuna para los virus que podrían usarse como posibles armas biológicas, pues si un país ´pudiera inocular a su población contra su propio virus secreto, podrían tener un arma para cambiar el equilibrio del poder mundial.
Lo cierto es que aún hay muchos vacíos en torno a los orígenes del Copvid-19 y su expansión mundial, lo que la dra. Alice Hughes señaló es que China se ha convertido en un estado donde se pueden decir lo que quieren que sea: “pueden seleccionar datos que se ajusten a esa narrativa y evitar la recopilación de datos que podrían resultar inconvenientes. Creo que es muy peligroso”, puntualizó.
Con información de La Tercera