Ricky, Ralston y Reiss Gabriel, son los trillizos que han sido condenados por un tribunal de Londres luego de ser declarados culpables del delito de conspiración para poseer arma de fuego con intención de poner en peligro la vida.
Ellos son los últimos, de ocho hombres acusados por el caso de la captura de tresarmas: una ametralladora Uzi, una pistola de carga automática y un revólver cargado además de municiones de la policía armada en el 2017.
Tras capturar las armas se hicieron estudios de las huellas de los involucrados, no obstante, según informó la Policía, “El trío trató de explotar su ADN y apariencia idéntica para tratar de evadir las consecuencias de sus acciones”.
Ellos habían intentado robar las armas para entregárselas a un criminal ´extremadamente peligroso´, según denominaron las autoridades: Aron Thomas. Este cumple cadena perpetua por este caso.