Un experimento realizado por científicos de la Universidad de Arizona en Estados Unidos, comprobó que el virus MS-2 similar al norovirus, puede propagarse en tan sólo cuatro horas por todo un edificio.
Los expertos llegaron a esta conclusión tras detectar su rápida presencia y reproducción entre el 40 y 60% de superficies, interruptores, pomos de puertas, teléfonos, computadoras y otros objetos.
Durante la fase de intervención, los empleados del lugar escogido, recibieron toallas desinfectantes impregnadas de compuestos de amonio cuaternario que, según los especialistas, reducen en un 99% la concentración general del virus.
“El uso de las toallitas con ese tipo de compuesto es un medio eficaz para protegerse de infecciones por norovirus e influenza, junto con la simple higiene de las manos, puede reducir la propagación de enfermedades", señaló el especialista Charles Gerba.