Mitt Rommey, quien aspira a ser el candidato presidencial del partido Republicano en los Estados Unidos, sigue en campaña y este miércoles reforzó su ambición de llegar a la Casa Blanca, luego de evitar por escaso margen una humillante derrota frente a Rick Santorum en la ciudad Michigan, su estado.
Romney logró una importante victoria en la primaria presidencial del martes, pero su ventaja fue de apenas 3 puntos porcentuales en el estado donde creció y donde su padre fue gobernador en la década de 1960.
El ex gobernador de Massachusetts también alcanzó un fácil triunfo en la primaria de Arizona, pero toda la atención se centraba en Michigan, donde Santorum, ex senador por Pensilvania conocido por su férreo conservadurismo religioso, había representado una inesperada amenaza.
"No ganamos por mucho, pero ganamos lo suficiente y eso es todo lo que cuenta", dijo Romney a sus seguidores el martes por la noche.
Estos resultados alcanzaron para aliviar la preocupación en torno a la capacidad de Romney de ganarse a la base republicana conservadora y recuperar su puesto como favorito en la carrera por la nominación para enfrentar al presidente demócrata, Barack Obama, en la elección general del 6 de noviembre.