Tras las constantes denuncias por parte de los vecinos de San Isidro, en las que afirman que las antenas colocadas en diferentes zonas de su distrito, causarían cáncer en las personas, el viceministro de comunicaciones, Raúl Pérez-Reyes Espejo negó las acusaciones y recalcó que la OMS posee numerosos informes que prueban lo contrario. El funcionario manifestó que Lima aún no posee el total de antenas necesarias y que se deben colocar 4 mil más como mínimo. Asimismo, resaltó que los equipos celulares son los que tendrían repercusiones en la salud. Por su parte, el Lic. Lorenzo Orrego, Director de Control y Suspervisión de Comunicaciones indicó que en realidad las antenas protegen a los usuarios, pues mientras más cerca estén, menos radiación reciben. Además indicó que los niveles de radiación son medidos diariamente y están cerca al 1%, lo cual es nada. Por ello, resaltó que los alcaldes están obstaculizado el desarrollo de la cobertura.