Alcalde de SJL sobre estado de emergencia: "yo no he dicho que sea un fracaso”

Tras el asesinato de dosserenosy los resultados poco fructíferos del estado de emergenciaaplicado en el distrito deSan Juan de Lurigancho, el alcalde Jesús Maldonadose pronunció sobre este tema, asegurando que esta medida no es un "fracaso" y que lamenta la muerte de estos jóvenes perteneciente al cuerpo deSerenazgo.

“Yo no he dicho que este estado sea un fracaso”, aseguró luego de ser cuestionado sobre las últimas declaraciones que ha emitido sobre el tema. 

“Ni he dicho que fue un fracaso, ni he dicho que sea exitosa (…) simplemente estamos diciendo que lo que tenemos el día de hoy es un estado de emergencia que no está dando los resultados que estamos buscando”, aclaró durante los cuestionamientos que se le hicieron sobre esta medida. 

Maldonado expuso que con el estado de emergencia se buscaban tres objetivos. En primer lugar, “control territorial por las fuerzas del orden y la Policía Nacional”, situación que no se ha logrado; la transferencia de presupuesto del gobierno central a la PNP, Ministerio Público y al INPE “para que puedan desarrollar mejor su trabajo” y tercero, “que ese recurso que se va a transferir que tenga dispositivos legales que puedan flexibilizar su ejecución”, precisando que la burocracia es uno de los principales flagelos para este punto. 

SERENOS ASESINADOS

Sobre este último suceso, aseguró que las víctimas se encontraban fuera de su “horario de oficio” y solicita a la Policía Nacional del Perú dar con los responsables de este asesinato. 

“Nosotros recibimos amenazas, no solamente Serenazgo (…) Hace poco han amenazado a nuestra fiscalizadora, enviándole videos con armas, con balas porque la labor que nosotros realizamos es cerrar prostíbulos, bares clandestinos, organizar a los motaxistas informales, entre otras cosas. Esa actividad de fiscalización muchas veces está 'protegida' por los delincuentes (...) Existe una zona de nuestro distrito que es el 10 de Canto Grande y está llena de ambulantes, cada vez que han entrado nuestros fiscalizadores, terminan con la cabeza rota, les enseñan armas, les enseñan un cuchillo, les cortan los chalecos, pero aun así seguimos en esta tarea”, indicó el burgomaestre.