Ana María Aranda, jefa de la Oficina de Control de la Magistratura(OCMA), descartó que en el 2011 cuando integró la Sala Civil de la Corte Suprema, haya favorecido a Rodolfo Orellana, al validar un laudo arbitral fraudulento que permitió que esta red se apodere de un predio en Lurín. Aranda argumentó que en ese año no se conocía sobre las presuntas irregularidades de Orellana, además, este tenía inscrito el título del inmueble en Registros Públicos. Asimismo, la juez suprema informó que la OCMA aperturó una investigación contra Félix Fernández Cáceres Casanova, exjuez civil de Chincha en Ica, denunciado por el dueño del camal de Yerbateros, Giovanni Paredes, por presuntamente estar vinculado a la red de Orellana.