Monseñor Salvador Piñeiro recuerda al Papa Francisco: “Ayacucho está de duelo”
La catedral de Ayacucho colocó un crespón negro en señal de duelo por la partida del Papa, a quien el monseñor llamó un pastor humilde y cercano.
La catedral de Ayacucho colocó un crespón negro en señal de duelo por la partida del Papa, a quien el monseñor llamó un pastor humilde y cercano.
Millones de fieles de la Iglesia Católica recuerdan con profundo cariño al Papa Francisco tras su partida la mañana del lunes 21 de abril. En el Perú, su visita en 2018 dejó una huella imborrable, especialmente entre quienes tuvieron la oportunidad de acercarse a él y recibir su bendición.
Uno de esos recuerdos permanece vivo en la memoria de Monseñor Salvador Piñeiro, arzobispo de Ayacucho, quien compartió varios encuentros con el Sumo Pontífice, tanto en Perú como en Roma. En esas ocasiones, pudo tomarse fotografías con él, recuerdos que hoy valora y guarda.
“Tengo muy vivo el recuerdo de tan querido pastor. Ayacucho está de duelo. Esta mañana se colocó un crespón negro en la puerta de la catedral como muestra del dolor por la partida del Santo Padre”, expresó con emoción.
SENCILLES Y AMOR HACIA LAS PERSONAS DEL SANTO PADRE
Monseñor Piñeiro destacó la humildad del Papa Francisco y su entrega a Dios. “Es un hombre sencillo, cercano, que se preocupa por todos, que dialoga, escucha y busca la unión incluso con quienes no son creyentes”, señaló.
También recordó con especial aprecio las palabras que el Papa dedicó al Perú, país por el que sentía un gran afecto y al que siempre tenía presente a sus santos y su historia. “Nos exhortaba a encontrar caminos de entendimiento, de diálogo, a superar el odio y la mentira”, remarcó.
Finalmente, lamentó que la partida del Sumo Pontífice ocurriera justo en el cierre de la Semana Santa. No obstante, dijo que es algo memorable para el mundo. “Es un día especial. Cristo ha pasado a la gloria del Padre, y hoy se ha encontrado con su buen servidor, el Papa Francisco”, concluyó.