Miembros de la Cámara de Comercio de Nasca denuncian lobby para beneficiar a minería ilegal
Investigadores y activistas cuestionan la reciente resolución del Ministerio de Cultura y exigen la renuncia del ministro Fabricio Valencia.
Investigadores y activistas cuestionan la reciente resolución del Ministerio de Cultura y exigen la renuncia del ministro Fabricio Valencia.
El Ministerio de Cultura (Mincul) oficializó el pasado 28 de mayo la reducción de más de 2.000 kilómetros cuadrados en la zona protegida de las Líneas de Nazca, una medida que representa el 42% del área total que hasta hace poco gozaba de protección arqueológica. Esta decisión, contenida en la Resolución Viceministerial N° 128-2025, ha generado una fuerte polémica entre especialistas y defensores del patrimonio cultural, quienes advierten sobre el impacto irreversible que podría tener en uno de los legados más importantes de la humanidad.
Zona liberada coincide con focos de minería informal
Uno de los elementos más controversiales es que la porción desprotegida coincide con áreas de alta actividad minera informal, especialmente relacionadas con la extracción de oro en el triángulo geográfico conformado por Arequipa, Ayacucho y Nazca. De acuerdo con registros oficiales de Formalización Minera, la superposición de concesiones dentro de sectores arqueológicos es notoria. Esta coincidencia ha encendido las alarmas de diversas organizaciones culturales y sociales que ven con recelo la aparente permisividad del Estado frente a actividades extractivas ilegales.
En declaraciones a la prensa, el titular del Mincul, Fabricio Valencia, afirmó que la medida no representa un riesgo directo para los geoglifos, pues —según indicó— las áreas excluidas de la protección no contienen evidencias arqueológicas documentadas. Sin embargo, también reconoció que dentro de la zona que permanece como reserva aún existe presencia de minería ilegal, lo que ha intensificado la preocupación por la vulnerabilidad del sitio inscrito como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
Mientras tanto, líderes sociales de la provincia de Nazca, como el secretario de Cultura del Frente de Defensa local, han convocado a la ciudadanía a manifestarse públicamente. El temor a que el legado dejado por civilizaciones prehispánicas se vea afectado por intereses económicos parece estar generando un escenario de tensión que podría escalar a un conflicto social de mayor magnitud.