Casi una semana ha pasado desde que un tsunami cobró la vida de más de 400 personas en el Estrecho de Sonda, ubicado entre las islas de Java y Sumatra, en Indonesia.
Sin embargo, la actividad del volcán Anak Krakatoa continúa manteniendo en vilo a la población, luego que la agencia vulcanológica del país, elevara a tres el nivel de alerta, en una escala de cuatro.
Ante este anuncio, muchos vuelos tuvieron que ser cancelados. En tanto las autoridades indonesias instaron a los residentes y turistas a mantenerse alejados del cráter. Asimismo recomendaron evitar estar cerca al mar en una distancia de entre 500 metros a 1 kilómetro.