Usando el Hubble divisaron cinco galaxias en el espacio exterior
En un sondeo al cielo hecho con una luz casi infrarroja, un grupo de astrónomos, utilizando el telescopio Hubble, divisaron cinco galaxias agrupadas.
En un sondeo al cielo hecho con una luz casi infrarroja, un grupo de astrónomos, utilizando el telescopio Hubble, divisaron cinco galaxias agrupadas.
En un sondeo al cielo hecho con una luz casi infrarroja, un grupo de astrónomos, utilizando el telescopio Hubble, divisaron cinco galaxias agrupadas.
Estas son tan distantes que a su luz le toma 13,1 billones de años en alcanzarnos, estos cúmulos de galaxias son las estructuras más grandes del universo, comprenden cientos de miles de nebulosas atadas juntas por la gravedad.
Se presume que este cúmulo en desarrollo o proto-cúmulo, ha crecido hasta ser comparable con el cúmulo de Virgo y más de 2 mil galaxias.
“Estas galaxias se formaron durante las primeras etapas de la formación de galaxias, cuando éstas recién habían empezado a agruparse”, dice Michele Trenti, líder del estudio. “El resultado confirma nuestro entendimiento teórico de la construcción de los cúmulos de galaxia”.
La mayoría de las galaxias del Universo residen en grupos y cúmulos. Los astrónomos han sondeado muchas de éstas en detalle a diversas distancias, pero encontrar cúmulos en las etapas más tempranas de construcción ha sido un desafío porque son poco comunes y débiles.
“Necesitamos mirar en distintas áreas porque las posibilidades de encontrar algo así de raro son muy pequeñas”, dice Trenti. “Es como jugar Batalla Naval: la búsqueda es de ensayo y error. Típicamente una región no tiene nada, pero si miramos al lugar correcto, podemos encontrar múltiples galaxias”.
Las cinco galaxias observadas por el Hubble son más pequeñas que la Vía Láctea, pero se le pueden comparar en brillo. Éstas son brillantes y masivas porque están siendo alimentadas con grandes cantidades de gas a través de fusiones con otras galaxias.
Las observaciones son parte del sondeo Brightest of Reionizing Galaxies (BoRG), que usa el Hubble para buscar las galaxias más brillantes de alrededor de 13 billones de años, cuando la luz se formó porque las primeras estrellas quemaron una nube de hidrógeno en un proceso llamado reionización.
El plan de los astrónomos es hacer observaciones de los espectros para poder definir de manera precisa la distancia del cúmulo. Estas inspecciones también arrojarán resultados sobre sus velocidades y mostrarán si están atadas gravitacionalmente.