Cuando oímos del avance de la tecnología y la inteligencia artificial, a menudo, más que venirnos a la mente imágenes del posible peligro que esta pueda representar, imaginamos juegos y electrodomésticos. Ni siquiera pensar en los androides letales y las aterradoras máquinas del cine.
Sin embargo, no hay que olvidar que una de las mentes más brillantes de la actualidad, Stephen Hawking, ya advirtió de lo que podría ser capaz la tecnología si se da a una carrera indiscriminada por convertir a las máquinas en seres con poder y conciencia propia.
Es que, aunque no lo hayamos advertido, es un hecho que la ciencia está creando robots cada vez más avanzados y que ya superaron por mucho las capacidades humanas, al menos en lo que a agilidad, fuerza (y porsupuesto, resistencia) se refiere.
Sin ir muy lejos, en febrero de este año la compañía Boston Dynamics, hasta hace poco propiedad de Google, presentó en YouTube su robot Handle, equipado con piernas, llantas y brazos. De esta forma es capaz de mantener su equilibrio en diversos terrenos.
Y no solo eso, porque este aparato puede sentarse y moverse a gran velocidad, extender sus brazos, transportar objetos e incluso saltar. Pese a que hablan de él como una revolución para el trabajo al interior de las empresas, verlo en acción en estas imágenes resulta algo atemorizante.
Pero ese no es el único trabajo de Boston Dynamics, basta con echar un vistazo a su cuenta de YouTube para encontrar máquinas tan o más capaces que Handle. Y de hecho, muchos de los comentarios que reciben los videos son bromas con algo de verdad acerca del terror que inspiran.
Como un dato adicional, cabe señalar que Boston fue uno de los participantes en el DARPA Robotics Challenge, un concurso llevado a cabo entre el 2013 y 2015 por la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA), del Departamento de Defensa de EE.UU.
Esta agencia se encarga del desarrollo de nuevas tecnologías de aplicación militar y, aunque el espíritu de la competición fue la creación de robots “con supervisión humana”para “conducir operaciones humanitarias, de ayuda en desastres y similares”, esto no deja de ser inquietante.
Porque, militares desarrollando cada vez máquinas más capaces e inteligentes que se ven y actúan como humanos (y animales), ¿no recuerda eso a cierta saga cinematográfica donde las cosas no acaban muy bien para nosotros?
De hecho, DARPA está detrás de varios proyectos de Boston. Por otro lado, el mes pasado se supo que Boston fue adquirida por la compañía japonesa Softbank, que como parte del trato, también compró a la nipona Schaft (que era igualmente de Google), especializada en robots bípedos.
¿Qué nos depara el futuro? ¿Se cumplirá entonces, una vez más, el viejo proverbio que dice “la realidad supera a la ficción”? Sinceramente, esperemos que no.