Puede padecerse de enfermedades hepáticas, incluso por más de 20 años, y no saberlo hasta llegar a una etapa avanzada. “Esta enfermedad es diagnosticada usualmente a los 60 años de edad; por lo que se deduce que aparece de manera asintomática a partir de los 40 años”, indica el Dr. Martín Padilla, gastroenterólogo del Hospital Guillermo Almenara de EsSalud.
En el mundo, más de un millón de personas fallecen cada año a causa de cirrosis hepática y, en el Perú, es la quinta causa de muerte por en enfermedad. Muchas personas desconocen el funcionamiento y la7 importancia del hígado en su organismo, un órgano noble que procesa todas las sustancias que ingerimos. Depura las toxinas del cuerpo y envía los nutrientes al riñón, cerebro, pulmones, corazón, huesos, entre otros. Pero no es cuidado como debiera.
“Aproximadamente el 30% de nuestra población tiene hígado graso en sus diferentes etapas, incluso algunos con cirrosis hepática, pero continúan realizando su rutina diaria hasta que aparece alguna complicación”, agrega el especialista de EsSalud. Tener hígado graso es uno de los factores más importantes para desarrollar la cirrosis, además de los malos hábitos alimenticios, la ingesta del alcohol, etc.
Asimismo, el hígado graso está relacionado con la obesidad, la diabetes mellitus, la hipertensión arterial, los triglicéridos y el colesterol alto por lo que es importante realizarse un control anual de ecografía y perfil hepático, a fin de prevenir y poder revertir el daño. “Debemos saber que la cirrosis es la parte final de la enfermedad y que solo se soluciona con un trasplante de hígado”, detalla el Dr. Martín Padilla.
TRATAMIENTO
Tener un hígado graso es una señal de alerta por lo que se debe acudir al médico de cabecera, internista o un gastroenterólogo. El tratamiento consiste en llevar una dieta adecuada, tener estilos saludables de vida y realizar ejercicio; todo ello va a permitir detener la enfermedad o evitar daños mayores.
Jorge Castillo Chávez, paciente asegurado, fue detectado de cirrosis hepática desde hace 4 años. Él relata que nunca tuvo síntomas hasta que su estómago y piernas comenzaron a hincharse. Entonces, al llegar a emergencia fue diagnosticado con el mal.
“Fue traumático enterarme de esto, pero luego de asimilar la noticia sigo las recomendaciones de mi médico y una dieta estricta de la nutricionista para evitar complicaciones”, comenta.
El Hospital Almenara de EsSalud atiende enfermedades grandes y complejas como es la cirrosis hepática, por lo que es importante que los pacientes sigan las instrucciones médicas para tener una mejor calidad de vida, mientras pasan la evaluación por los médicos de la Unidad de Hígado para tener la mejor alternativa de tratamiento, que puede incluir un trasplante de hígado en el futuro.