La sala de quimioterapia del Hospital II de EsSalud, en Cajamarca, es ahora un ambiente cálido que cuenta con 10 diez cómodos sillones debidamente implementados, mantas a disposición, calefactores y material de distracción. Hasta aquí llegan los pacientes oncológicos para realizarse distintos procedimientos de acuerdo a su tratamiento, antes ellos debían viajar hasta hospitales centrales, pero ya no.
“Estamos muy contentas, nosotras llegamos como si esta fuese nuestra casa porque las licenciadas y técnicas nos dan un trato muy especial”, comenta María Ramírez, una mujer de 67 años de edad que hace más de un año fue diagnosticada con cáncer de colon. Al inicio, sintió que la noticia la destrozó, pero pronto tuvo, además de la atención médica, el soporte emocional que la mantiene llena de fortaleza hasta hoy.
Ella llegó hasta la nueva sala de quimioterapia y allí se encontró con Elizabeth Cadenillas o, simplemente, “Eli” como la llama de cariño. Ellas se hicieron amigas en esta sala de quimioterapia y hoy María ve partir victoriosa a Eli, a su amiga de 60 años de edad que ha superado el cáncer de mama y hoy es su última sesión de quimioterapia.
“Emocionalmente nos sentimos muy bien porque estamos en nuestra Cajamarca, ya no hemos necesitado ir a otro lugar para llevar nuestros tratamientos, ya no nos hemos desvinculado de nuestras familias y esa es una gran fortaleza que tiene este hospital”, comenta Doña Eli luego de ser aplaudida por las licenciadas y amigas de esta sala de quimioterapia.
Para el gerente de la Red Asistencial de Cajamarca, Dr. José Banda, la gestión para la implementación de esta sala ha sido muy satisfactorio. “De esta manera nosotros logramos dar el tratamiento que corresponde al asegurado y al mismo tiempo estamos haciendo cirugías oncológicas de alta envergadura estamos a la par de Trujillo y Lima de grandes instituciones por ello el paciente acá tiene todo el tratamiento ecológico que necesita”, expresó Banda.
Así como María y Eli, más de 200 pacientes oncológicos vienen recibiendo sus procedimientos de quimioterapia en esta sala repotenciada, pero además la calidez del trato de cada una de las licenciadas cuyo gran corazón les permite brindar palabras de aliento, confianza y fortaleza, muy importantes en este proceso.