Esta semana un asesinato conmovió al oriente peruano y trajo terribles consecuencias. Se trata del homicidio de la líder indígena de la etnia shipibo-konivo, Alicia Arévalo, activista de derechos de su comunidad, admirada por sus conocimientos ancestrales y su canto, fue abatida de tres disparos en Ucayali.
En las últimas horas se dio a conocer, que tras el cobarde asesinato los pobladores de la comunidad hicieron justicia con sus propias manos y asesinaron salvajemente al ciudadano canadiense Sebastián Paul Woodroffe. A quien señalaban como el responsable directo de la muerte de la anciana de 81 años.
La Policía y la Fiscalía vienen investigando este caso pues habrían más personas involucradas. En este informe le mostramos más detalles de esta nefasta historia.