El can fue retirado del centro antirrábico, ubicado en Breña, por disposición de la Décima Fiscalía Provincial de Lima, que investiga el caso de la muerte del delincuente, y al cumplirse los diez días en que el animal debía permanecer en cuarentena.
Sin un bozal que le impida ladrar y atado de una correa, Lay Fun salió en horas de la mañana del centro ante la mirada y el aplauso de por lo menos medio centenar de personas, muchos de ellos defensores de los animales.
De inmediato, fue introducido en una camioneta y llevado a la sede de la Policía Canina, en el Rímac, institución que ahora tendrá a cargo su custodia, según informó el comandante José Luis Gallardo Peralta.
La directora del Centro Antirrábico, Mónica Villanueva, informó que está comprobado que el can no tiene rabia y dijo que durante el tiempo de cuarentena no presentó ninguna sintomatología y se mostró muy “dócil”.
La nota curiosa de la salida de Lay Fun la puso Priscilla, una perrita que llegó vestida de novia y que, según su dueña, está preñada del controvertido can.
Según el comandante Gallardo Peralta, el famoso perro tendrá en el Rímac dos entrenadores y no descartó la posibilidad de que desfile por Fiestas Patrias, ya que “demostró tener vocación policial”.
Gallardo dijo que el perro es tranquilo, dócil y pidió a las asociaciones de amigos de los animales que pierdan cuidado porque la Policía Canina le dará un buen trato a Lay Fun, al igual que a los otros canes custodiados por esa dependencia.