El presidente de la Corte Suprema, César San Martín, dispuso una indagación del caso del estudiante Gastón Mansilla, quien fue encarcelado por matar a un ladrón que intentó asaltarlo junto a otro delincuente.
San Martín ordenó que el Poder Judicial revise si la resolución que se expidió cumple con la jurisprudencia que estableció la Corte Suprema, en materia de legítima defensa. Según expertos, se habría tomado en cuenta el principio de proporcionalidad-derogado –derogado en el 2003- y no el de racionalidad.
“Me parece importante resaltar que el derecho no puede retroceder frente a lo ilícito y que siempre existe un valor de prevalencia de la defensa de derechos legítimos, que pueden defenderse hasta el final frente a este tipo agresiones”, enfatizó San Martín.