El presidente de Colombia, Gustavo Petro, advirtió a Estados Unidos que no intente realizar ataques terrestres en su país ni en Venezuela, luego de que el senador republicano Lindsey Graham afirmara que Donald Trump informaría al Congreso sobre eventuales operaciones militares en ambos territorios como parte de la lucha contra el narcotráfico.
Graham adelantó el 26 de octubre en una entrevista con CBS que la Casa Blanca evalúa acciones en tierra tras más de un mes de operaciones estadounidenses en el Caribe, destinadas presuntamente a contrarrestar el tráfico de drogas.
En respuesta, Petro recordó la historia de Colombia y enfatizó que, si su pueblo es agredido, se arma y resiste. “No lo intenten”, sentenció el mandatario colombiano en su cuenta de X, haciendo referencia a la disposición de “decenas de miles de coroneles aurelianos” dispuestos a tomar las armas.
Mientras Petro respondía, Estados Unidos desplegó el destructor lanzamisiles USS Gravely en Puerto España, Trinidad y Tobago, con el objetivo declarado de realizar ejercicios de entrenamiento, cooperación en seguridad marítima y misiones humanitarias.
Jenifer Neidhart de Ortiz, encargada de negocios de la embajada estadounidense en Puerto España, aseguró que la presencia del buque busca enfrentar amenazas compartidas como el crimen transnacional y fortalecer la resiliencia regional.
TENSIÓN EN EL CARIBE ANTE POSIBLE ESCALADA MILITAR
Desde el despliegue naval ordenado por Trump, más de 40 personas han muerto en ataques estadounidenses en el Mar Caribe. La Casa Blanca justifica estos bombardeos contra varias lanchas como parte de la lucha contra el narcotráfico.