El portal "Hoy Los Ángeles" publicó la historia de Suzy Favor Hamilton, quien hace unos meses reveló su insaciable deseo sexual en su autobiografía "Fast Girl", donde cuenta también cómo pasó de deportista a dama de compañía.
El punto de quiebre para la exmedallista, hoy de 47 años, fue perder la carrera de los 1500 metros en los Juegos Olímpicos de Sidney 2000. Ella hasta pensó en el suicidio, para salvarse decidió hacer algo que la satisfacía tanto como el deporte.
Inmediatamente tomó un avión y se fue a Las Vegas para ser dama de compañía, cobraba hasta 600 dólares por hora y era una de las personas más solicitadas por sus servicios, además de la mejor pagada.
"Ya en Sidney me prostituía y cada vez me gustaba más jugar con fuego. Era adicta al sexo. Mi voluntad de ser la mejor en la pista fue reemplazada por mi deseo de ser la mejor en la cama", señala Suzy.