Una noche tranquila y con poco trabajo en un restaurante de Illinois, Estados Unidos, resultó estar llena de sorpresas para un camarero de 19 años de edad que no podía creer lo que hizo un cliente para agradecer su excelente servicio.
El comensal dejó una exorbitante propina de 1000 dólares tras hacer un consumo de solo 20, ya que había comprado un simple menú del día. Sin embargo, el cliente no dudó en dejar el considerable incentivo al camarero que lo atendió.
El hombre había dejado una nota en la parte posterior de la recepción para explicar la generosa bonificación, primero agradeciendo a Brendan Motil por su "servicio amable". "Estás haciendo un gran trabajo. No estoy seguro de cuáles son tus sueños en esta vida pero espero que esta propina ayude a realizarlos”, decía la nota.
En el papel también se podía leer otras razones por las que el hombre dejó ese tipo de propina. "Mi deseo es que la gente sea respetuosa y trate con más cuidado y calma a los demás. El mundo puede ser muy negativo y violento, así que realizo actos aleatorios de amabilidad". Sin lugar a dudas, este camarero seguirá atendiendo a sus clientes como lo viene haciendo, pues sabe que siempre hay gente generosa y agradecida.