El Papa Francisco hablo por primera vez sobre su propia muerte, al explicar que su popularidad “durará entre dos y tres años” antes de entrar a la "Casa del Padre".
"La vivo (su popularidad) como una generosidad del pueblo de Dios. Interiormente, intento pensar en mis pecados, en mis errores, para no enorgullecerme, porque sé que durará poco tiempo. Dos o tres años. Y después, ¡a la Casa del Padre!", expresó públicamente.
Asimismo, no descartó una posible dimisión, en caso no contara con las fuerzas suficientes para cumplir con sus responsabilidades.
Cabe señalar, que fuentes del Vaticano informaron que el sumo pontífice de 77 años, habría tocado el tema de su muerte con personas de confianza, en ocasiones anteriores.