¿Por qué en Canadá perforar un condón es una agresión sexual?
La Corte Suprema de Justicia de Canadá dictó que perforar deliberadamente un preservativo para que una mujer quede embarazada en contra de su voluntad es una agresión sexual.
La Corte Suprema de Justicia de Canadá dictó que perforar deliberadamente un preservativo para que una mujer quede embarazada en contra de su voluntad es una agresión sexual.
La Corte Suprema de Justicia de Canadá dictó que perforar deliberadamente un preservativo para que una mujer quede embarazada en contra de su voluntad es una agresión sexual a pesar de que se trate de una relación consentida.
El tribunal confirmó así una decisión en primera instancia de 2006 contra Jaret Hutchinson, un hombre originario de Nueva Escocia, en la costa atlántica, que había pretendido consolidar su relación de pareja provocando el embarazo de su compañera.
El joven perforó un preservativo, según confesó posteriormente a la mujer cuya identidad no ha sido revelada y que resultó finalmente embarazada. La joven resolvió abortar e inició un juicio contra su pareja.
Por unanimidad, los siete integrantes de la Corte concluyeron: “El sabotaje del preservativo por el acusado constituye un fraude”. “La demandante no había dado su consentimiento para tales actos (copular con el fin de procrear)”, consideraron los magistrados.
Por esta razón, “no otorgó su acuerdo para la actividad sexual en cuestión”. De esta manera confirmaron la condena del hombre por “agresión sexual”.