La Fiscalía de Kenia llamó a una cabra para que formara parte de un proceso que se le sigue a Katana Kitsao, un sujeto acusado de mantener relaciones sexuales con dicho animal.
Los jueces optaron por la presencia de la cabra como evidencia del caso. El hombre de 28 años admitió que “abusó” sexualmente del animal, por lo que fue condenado a 10 años de prisión efectiva.
Katana fue sorprendido por un testigo mientras mantenía relaciones coitales con la cabra. De inmediato alertaron al dueño, quien luego llamó a la Policía. Un veterinario-forense le practicó los análisis respectivos al animal y determinó que efectivamente fue violada.