En el Reino Unido, un hombre quiso sacar una fotografía de su helado en una playa antes de comerlo, pero en su lugar captó el momento en que una gaviota hambrienta le robaba el apetitivo.
Phil Grant relató a medios locales que acababa de comprar el helado en una conocida tienda de Yorkshire y ni siquiera pudo probarlo antes de que el pájaro se lo llevara. Por fortuna, el vendedor de helados fue testigo del robo y le dio un segundo cono con descuento.
"Sentí que algo muy grande rozaba la parte superior de mi cabeza y lo siguiente que vi fue una gaviota que estaba en las rocas debajo de nosotros, mirándome mientras se comía mi helado", contó Grant, agregando que se quedó de piedra, sosteniendo un cono vacío mientras su esposa se reía del espectáculo.