Un carpintero holandés decidió hacer realidad uno de los pasajes bíblicos más famosos y construyó una enorme embarcación que podría ser capaz de albergar a gran cantidad de animales. Johan Huibers realizó un modelo a escala que mide 130 metros (427 pies) de largo, 29 metros (95 pies) de ancho y 23 metros (75 pies) de altura.
Para iniciar este ambicioso proyecto, Huibers se inspiró después de tener un sueño en el que vio parte de su Holanda natal sumergida en una inundación como la que aparece en el libro del Génesis. De igual manera, el barco cuenta con espacios donde se pueden encontrar algunos animales reales, mientras que otras especies solo son réplicas por tratarse de criaturas feroces.
La nave está anclada en la ciudad de Dordrecht, al sur de Rotterdam y está abierta al público en general que disfruta de una atracción nunca antes vista y que representa un hecho histórico muy importante para los seguidores de la religión cristiana.