Hace tres años un joven de Singapur saltó a la fama a tal punto que los diarios de ese país se peleaban por pactar una entrevista luego que se enterasen que legalmente su nombre era Batman Bin Superman (significa Batman, hijo de superman). Hoy, este hombre triplicó su popularidad tras ser detenido por robo y tráfico de estupefacientes.
Batman fue detenido por primera vez en agosto de este año, cuando una cámara de seguridad lo captó hurtando productos del almacén de un supermercado por un valor de $. 400. Días después, su hermano, Nurazman Superman lo denunció por haberle robado y gastado el dinero de su cuenta de ahorro.
Pues este hombre, cuyo padre no tuvo mejor idea que ponerle el nombre de dos héroes que paradójicamente luchan contra la criminalidad, tendrá que pasar al menos 33 meses en prisión.
A causa de esta condena, Batman de Singapur ha causado una gran decepción entre sus seguidores y admiradores en el país asiático, ya que, debido a su peculiar identidad, se había convertido en toda una celebridad. Incluso le habían creado una página oficial en Facebook y Twitter.