El delantero de la selección chilena, Mauricio Pinilla, se tatuó en la espalda la foto del momento en el que falló el gol que pudo darle el pase a su equipo a los cuartos de final del Mundial Brasil 2014.
Se conoce que el remate golpeó el travesaño al final del tiempo extra, en un partido donde Brasil se impuso a Chile 3-2 en la tanda de penales.
Sin embargo, pese a la decepción de la derrota, Pinilla quiso registrar el momento culminante del partido en su piel.