Tras la gran cantidad de críticas en contra de la Modernización de la Refinería de Talara, el asesor técnico del proyecto, Max Falla, defendió el plan del Gobierno y aseguró que el desembolso de más de 3500 millones por parte del Estado es una buena inversión. Para el especialista, este proyecto significará un cambio importante en la calidad del daño ambiental producido por la extracción, además de un considerable número de empleos y la disminución del precio de la materia prima. Finalmente, señaló que el proyecto comenzará a funcionar a partir del 2019.