Una tensa jornada se vivió esta mañana en la playa Pescadores, en Chorrillos, donde más de 500 hombres y mujeres de mar se atrincheraron en protesta contra el avance de un proyecto municipal. Aunque el alcalde Fernando Velasco había asegurado que las obras no afectarían el muelle ni la zona pesquera, los manifestantes alegan que están siendo desplazados y que ya no pueden trabajar con normalidad.
“Nosotros somos pescadores, no nos dejan trabajar. Cerraron los accesos, los clientes ya no pueden entrar a comprar nuestro pescado”, denunció una de las manifestantes. La medida responde, según dijeron, a la falta de cumplimiento de los acuerdos previos, ya que aseguran que el desalojo no solo fue dirigido a comerciantes con puestos informales, sino también a quienes faenan desde hace décadas en el lugar.
DENUNCIAN QUE MUNICIPIO ENVIÓ A ENCAPUCHADOS
La protesta se intensificó cuando los pescadores advirtieron la llegada de un grupo de civiles encapuchados y con gorras. “No son pescadores, son delincuentes contratados por el alcalde para sacarnos a la fuerza”, acusaron. Ante esta situación, se desplegó un fuerte cordón policial para evitar enfrentamientos. Los ánimos se alteraron cuando los manifestantes intentaron acercarse a este grupo, al que señalan como ajeno a la comunidad chorrillana.
Desde la Municipalidad, el subgerente de Inspección y Control de Sanciones, Roland Jhon Jayo Alanya, negó las acusaciones. “Eso es totalmente falso. Nosotros no los hemos contratado. Los trabajadores municipales están plenamente identificados. Los sujetos encapuchados no forman parte del equipo edil”, afirmó. También defendió la legalidad del proyecto: “La municipalidad no intervendrá el muelle ni la caleta, que están bajo competencia del Ministerio de la Producción. Lo que hemos recuperado es un espacio destinado al estacionamiento que estaba siendo explotado de forma ilegal por una asociación”.
Pese a ello, los pescadores insisten en que las obras los afectan directamente. “El acceso está cerrado, los camiones no pueden entrar, los clientes no llegan. ¿Cómo trabajamos?rdquo;, reclamaron.
Aunque desde la municipalidad se insiste en que el proyecto beneficiará a los pescadores a largo plazo, los involucrados exigen garantías inmediatas para continuar con sus actividades.