Elsa Torres, madre de Sheyla Mayumi Cóndor, una joven de 26 años cruelmente asesinada y descuartizada en un departamento en Comas, denunció públicamente que la comisaría de Santa Luzmila no aceptó su denuncia cuando intentó reportar la desaparición de su hija. Este caso, que ha conmocionado al país, apunta como principal sospechoso al suboficial de tercera de la Policía Nacional, Darwin Condori, quien permanece prófugo.
La progenitora relató entre lágrimas el calvario que vivió al intentar obtener ayuda de las autoridades. "Yo ya tenía las pruebas, quería poner la denuncia contra este señor, pero me dijeron que no podía porque, según ellos, mañana o pasado mi hija iba a aparecer y que yo podría ser denunciada por calumnia", explicó a Buenos Días Perú. "Me dijeron: 'Tu hija es mayor de edad, de repente está con su enamorado y ya volverá'. Pero yo sabía que algo estaba mal. Rogué llorando para que me ayuden a revisar cámaras, pero no me hicieron caso", añadió.
CINCO DETENIDOS Y PRINCIPAL SOSPECHOSO PRÓFUGO
Sheyla fue encontrada sin vida dentro de una maleta en el departamento del suboficial Darwin Condori, quien aparentemente mantuvo el cuerpo en su vivienda por varios días. Cuando la policía finalmente intervino, hallaron a cinco jóvenes estudiantes de la Marina en una fiesta, quienes habrían ignorado los fuertes olores provenientes del lugar.
Cabe mencionar, que el acusado ya contaba con antecedentes por un presunto caso de violación en grupo ocurrido en enero de 2023, donde las víctimas fueron tres jóvenes de 19, 20 y 23 años. A pesar de estas denuncias, Condori continuaba en funciones y estaba asignado a labores relacionadas con la seguridad del Foro APEC 2024.
La madre de Sheyla señaló directamente a un policía identificado como Cabrera, quien habría rechazado recibir su denuncia. "Me dijeron que no llorara, que mi hija iba a aparecer. Pero ya pasaban los días y no había rastro de ella. Yo tenía el nombre completo del sospechoso, pero aún así no quisieron ayudarme", declaró desde la Dirincri.
Por su parte, el abogado de la familia adelantó que se evaluará si existe responsabilidad de los policías de la comisaría por encubrimiento. "Estamos ante un posible delito de feminicidio que tiene como pena máxima la cadena perpetua, pero también debe investigarse por qué no se recibió la denuncia, lo cual podría implicar encubrimiento personal", señaló el defensor.
Entre lágrimas, Elsa Torres expresó su dolor y exigió justicia. "Mi hija no merecía morir así. Ella tenía sueños, planes de viajar y muchas cosas por delante. Pido cadena perpetua para ese hombre, porque no se puede permitir que esto siga pasando", concluyó.