En el distrito de San Juan de Lurigancho, se realizó una nueva intervención policial a malos ciudadanos que se reúnen al margen de la ley, en pleno toque de queda, pero esta vez los protagonistas fueron un grupo de policías de la comisaria de “Canto Rey”, que celebraban una fiesta liderada por el comisario del sector.
Tras una alerta telefónica de los vecinos de la avenida El Sol, se montó este operativo, los policías llegaron hasta la cancha deportiva y ayudados de escaleras confirmaron que en el interior había personas reunidas y de inmediato rompieron el cerrojo para ingresar.
El agasajado de la celebración era el comisario de Canto Rey, el Mayor PNP Pablo Vega Tafur, de 54 años, quien estaba reunido con sus subalternos, escuchando música a todo volumen, brindando con cervezas, vinos, piscos y otras bebidas alcohólicas.
Todos los involucrados fueron trasladados a la comisaria Santa Elizabeth. En la dependencia policial una suboficial tuvo una reprochable actitud frente a su colegas. Se trata de la suboficial técnico de segunda, Iraida Zamora Nicasio, quien cumplía servicio de patrullaje a pie de 7 de la mañana a 3 de la tarde, terminado este turno habría ido a reunirse con sus colegas para la celebración.
Cabe indicar que todos estos malos efectivos policiales serán denunciados por violar las medidas sanitarias para evitar el contagio de coronavirus y el delito de incumplimiento de deberes.